Esta es una página para difundir la Doctrina Católica. El nombre es redundante porque no existen templarios no católicos, pero dado que masones y delirantes de todos los colores han acaparado el nombre, se ha hecho necesario el adjetivo.

domingo, 28 de septiembre de 2008

HOMOSEXUALIDAD

HOMOSEXUALIDAD
LOS QUE LA PADECEN
LOS QUE LA PROMUEVEN


R.P.Brian Moore



1- INTRODUCCIÓN
2- DEFINICIÓN Y TÉRMINOS
3- CAUSAS
4- CLASES
5- CONSECUENCIAS
6- VALORACIÓN MORAL
7- MEDIOS PARA VENCERLA
8- LA PROPAGANDA
9- LEGISLACIÓN
10- BIBLIOGRAFÍA



1)- INTRODUCCIÓN

“Antes, en esta Isla, la homosexualidad estaba prohibida; ahora está permitida; yo me voy antes de que la hagan obligatoria”
Esta frase enuncia en forma jocosa una triste realidad: en la actualidad no solo se quieren mostrar las prácticas homosexuales como algo natural, sino que también se quiere hacer callar por la fuerza -de la ley- a todo aquel que objete tal premisa. Más grave aun: se le ha dado un encuadre jurídico a tales prácticas con el “casamiento” gay y el derecho a la adopción.
En este tema, como en el de divorcio y el aborto, se utiliza un lenguaje inteligente para arrastrar la masa al error. Se busca llegar al cerebro a través del corazón. Y entonces así como los que rompieron su vínculo matrimonial tienen derecho a “rehacer su vida”; como la mujer “tiene derecho a disponer de su cuerpo” (=aborto); existiría también el derecho –en nombre del “amor”- a una sexualidad desviada, aun cuando sea contra natura.
En este opúsculo prescindimos absolutamente de juzgar las intenciones y los móviles de las personas implicadas en estas prácticas. Y ciertamente distinguimos, desde ya, las personas que sufren y combaten esta tendencia, de aquellas que se jactan de ella. Pero queremos ayudar a nuestros fieles a discernir la gravedad del mal, tanto desde el punto de vista natural como de la moral cristiana. Por eso vamos a dejarle la palabra a los especialistas en el tema y nos apoyaremos, claro, en el Magisterio de la Iglesia.



2)- DEFINICIÓN Y TÉRMINOS EMPLEADOS

a- El término “homosexual” tiene en su raíz la palabra “homo”, del griego = “igual” (no hay que confundir con el término latino = “hombre”). Por eso el término homosexual se refiere tanto a hombres como a mujeres.
El término lo empleó por primera vez (en 1869) Karl María Kertbeny en un panfleto anónimo apoyando la revocación de las leyes contra la sodomía en Prusia. Posteriormente , en 1886, el libro “Psychopathia Sexualis” de Richard Freiherr von Krafft-Ebing popularizó el concepto.
Sinónimo de homosexual es “sodomita”. El término proviene de Sodoma, la ciudad bíblica castigada por practicarse allí pecados contra natura

“Se llama homosexual a la persona que siente atracción erótica hacia las personas de su mismo sexo, pero que se sabe miembro de su sexo; a diferencia del transexual que se siente atraído hacia las personas de su sexo, pero que se cree miembro del sexo complementario y que por lo tanto también cree que está erróneamente en ese cuerpo” (Dra. María C. Morales Peralta)

b- El término “gay” viene del inglés y significa “alegre”, “festivo”, calificativo en el que subyace el falso concepto de “vida feliz” como algo inherente a la condición homosexual. Se aplica especialmente a los homosexuales hombres.
c- Cuando el homosexualismo tiene lugar entre mujeres, se suele hablar de “lesbianismo”. El término viene de la Isla de Lesbos (Grecia) porque allí vivía la poetisa Safo, la cual habría practicado el homosexualismo.

3)- CAUSAS
Los autores discuten acerca del origen de las tendencias o conductas homosexuales. : ¿Nacen, los hacen o se hacen? Se pueden reducir a tres tipos de causas:
3.1. Biológicas
3.2. Psicológicas
3.3. Morales

3.1. Biológicas

Vamos a exponer en primer lugar el pensamiento de los que dicen que el homosexualismo no tiene ningún asidero en lo biológico o genético y luego la argumentación de aquellos que piensan la homosexualidad como algo inevitable porque “Genio y figura desde la cuna hasta la sepultura”


En contra:

3.1.1. El factor genético

1. “Las hipótesis biológicas, en las que desde antiguo tanto se esperaba, han resultado en la práctica desestimadas. La apelación a posibles factores genéticos ha resultado, hasta hoy, irrelevante”

“Las investigaciones endocrinológicas han puesto de manifiesto la importante función desempeñada por las hormonas sexuales gonadales sobre el desarrollo y organización del sistema nervioso durante la vida fetal -diferenciación sexual del cerebro-, pero sin que de ello pueda derivarse ningún resultado adicional que sea útil a la explicación de la homosexualidad. Por otro lado, en las numerosas y sofisticadas pruebas analíticas hormonales diseñadas, resulta imposible descubrir entre homosexuales y no homosexuales diferencias que sean relativamente significativas.” (Dr.Aquilino Polaino-Lorente)


2. “Los partidarios del criterio de que es una condición sostienen la teoría de que esta condición se posee por razones biológicas que pueden ser establecidas por los genes. Pero si esto fuera cierto, los gemelos tendrían siempre la misma orientación sexual. Sin embargo, hay numerosos casos de gemelos que no son idénticos en su orientación sexual; especialmente los que, por haber crecido separados, han recibido distinta educación.
Otros consideran que la homosexualidad está condicionada por factores hormonales. Pero la mayoría de los homosexuales tienen todos los niveles de hormonas en la normalidad. Aunque se puede dar el caso que las personas que sufren enfermedades con desequilibrio hormonal, como los varones con pérdidas de la función de los testículos desde niños, pueden llegar a ser un "caldo de cultivo" para ser reclutados por homosexuales militantes. Sin embargo, si son educados como varones, no caen en el homosexualismo, aunque sus niveles hormonales no sean normales.” (Dra. María C. Morales Peralta)

3. “En cromosomas, hormonas sexuales y constitución física los homosexuales son normales” (Dr. Gerard J.M. Van Den Aardweg)

4. El Doctor Segú pasa revista a algunos estudios hechos al respecto y concluye: “Las conclusiones que se sacan de todas estas experiencias son que en la etiología de la homosexualidad pareciera no tener mayor importancia graves anomalías de los cromosomas sexuales y que con los métodos que se disponen en la actualidad no es posible hallar diferencias cromosómicas al comparar individuos heterosexuales y homosexuales”

5. Otros dejan la puerta abierta a posibles descubrimientos médicos, pero dicen que hoy día no existe ninguna evidencia científica de que la homosexualidad tenga base genética o médica. Los estudios que se han hecho hasta el momento son tendenciosos y no son suficientemente sólidos.
En 1992 se quiso establecer qué fundamento puede tener la hipótesis médica. “En dicha investigación, llevada a cabo por computadoras, se estudiaron más de 3,400 artículos publicados desde 1975 hasta ese año en búsqueda de las causas biológicas, genéticas y hormonales de la homosexualidad. Solamente en dos de esos artículos, ambos muy especulativos, se intentaba identificar la causa de la homosexualidad como algo de índole genético, biológico, hormonal o neurológico” (Dra. Dawn Siler)

6. Los terapeutas Masters y Johnson afirman en su obra “Human Sexuality”: “La teoría genética de la homosexualidad ha sido en general descartada hoy día”; “a pesar del interés en posibles mecanismos hormonales en el origen de la homosexualidad, ningún científico serio hoy sugiere que pueda existir una simple relación de causa y efecto” (p.319-320)

Por eso se afirma en otro trabajo: “Lo más que se puede decir es que pudiera existir alguna base genética, hormonal, neurológica o cerebral que predispone a la homosexualidad. Esta pudiera inclinar a unas personas más que otras al homosexualismo, pero no obligarlas a practicarlo”.


3.1.2. El factor hormonal
“Refiriéndonos al factor hormonal puede afirmarse que no se ha conseguido establecer una relación entre el nivel de excreción de hormonas y la elección del objeto sexual. Además pudo comprobarse que no existe antagonismo entre el sexo cromosómico y el sistema endocrino en los homosexuales”
“Los intentos tendientes a relacionar las hormonas con la homosexualidad dieron reiteradamente resultados negativos. Las experiencias comprueban que los homosexuales no presentan alteración endocrina alguna que justifique su conducta sexual” (Dr. Héctor Segú)

Por el contrario: “…A la producción hormonal de la placenta le cabe la importantísima y trascendental competencia de dirigir la diferenciación sexual y cerebral del embrión que está en el claustro materno. Este es un hecho demostrado desde el año 1966, y no sólo para la especie humana, sino para los mamíferos superiores, que arroja un saldo de publicaciones anuales de entre 1.200 y 1.700 según cada año.
Desde el año 1976 a la actualidad este hecho no ha sido más que probado y verificado una y otra vez. Esto significa que el cerebro del embrión se estructura, autoconstituye y configura de modo diverso, según sea varón o hembra, en función del influjo de las hormonas que produce la placenta.
Una vez producido el parto las hormonas ya no dirigirán el comportamiento ni la mayoría de las facultades y funciones de la persona, sino que lo hará el sistema nervioso central, previamente diferenciado.” (Dr. Polaino)


A favor:

1. En 1991 el Dr. Simon Le Vay, que se declaró homosexual, publicó un estudio en la revista Science en el cual mostraba diferencias en los cerebros de hombres homosexuales y heterosexuales.
Sin embargo, dicho estudio adolecía de ciertas deficiencias importantes:
En primer lugar, Le Vay utilizó solamente 41 cadáveres en su estudio, una muestra muy pequeña para una investigación científica de esta índole.
En segundo lugar, todos los homosexuales del grupo estudiado habían muerto de SIDA o de complicaciones relacionadas con esta enfermedad, la cual puede afectar el tejido cerebral. Más aún, Le Vay no estaba seguro si el resto del grupo era de verdad heterosexual, sino que asumía que lo era.
2. En otro estudio, los doctores Allen y Gorski de la Universidad de California en los Angeles también alegaron una supuesta conexión entre el homosexualismo y la estructura cerebral. Sin embargo, admitieron que un porcentaje significativo de los cerebros analizados pertenecían a víctimas de SIDA, enfermedad que puede afectar el tejido cerebral
3. Otra investigación, conducida por los científicos Bailey y Pillard, intentó mostrar el origen genético del homosexualismo por medio del estudio de mellizos homosexuales. Pero como ha señalado Ann Fausto Stirling, bióloga de la Brown University: "Para que estudios como éste tengan sentido, habría que estudiar a mellizos que han sido criados aparte. Se trata de una mala interpretación genética." Es obvio que los mellizos que son criados en el mismo hogar pueden tener las mismas experiencias familiares y ambientales y no sólo los mismos genes
4. La revista Time publicó un artículo sobre un estudio publicado en la revista Science, en el cual se alegaba que el origen de la homosexualidad se encuentra en el cromosoma X (el cromosoma proveniente de la madre). Los investigadores estudiaron 40 parejas de hermanos homosexuales y encontraron que 33 de ellas compartían 5 diferentes trozos de material genético agrupados alrededor de un área particular del cromosoma X. Pero, en el mismo artículo se admite que, antes que las conclusiones sean aceptadas como definitivas, se necesita repetir este tipo de investigación. Además, el mismo artículo señala que los investigadores admiten que su "descubrimiento" no puede explicar otros tipos de homosexualidad masculina que existen. Por último, dichos investigadores también admiten que, en los casos estudiados por ellos, el material genético en cuestión puede simplemente estar asociado a la homosexualidad en vez de ser su causa directa

(En apéndice insertamos un extracto de una ponencia del catedrático de Genética Nicolás Jouve de la Barreda, en la que explica con precisión este asunto)


5. Respecto a la alteración genética Blázquez cita dos casos:
- Síndrome de Turner XO
- Síndrome de Klinefelter XXY: cuando un óvulo XX es fecundado por un esperio Y, el resultado inevitable es XXY. Debido a la presencia de otro cromosoma X, se obstaculiza el desarrollo normal del Y. Estas personas suelen tener órganos sexuales raquíticos, mamas bastante desarrolladas y musculatura con rasgos muy femeninos. Casi siempre son estériles por falta de células capaces de producir espermio” (p.481)
“las víctimas del síndrome de K. son carne de cañón para la prostitución masculina” (p.482)

6. Existe el fenómeno del “hermafroditismo”: composición genética normal pero con tejido ovárico o testicular dando lugar a una apariencia externa dual que puede inclinar hacia la dualidad sexual.
Pero generalmente hay una clara prevalencia de uno de los sexos y alguna presencia del otro sexo en un resto de órgano claramente atrofiado.
“La solución del problema en estos casos, de acuerdo a la doctrina moral y la práctica médica, implica, después de determinar cuál es el sexo prevalerte, la extirpación quirúrgica de lo que no corresponda a tal sexo con los ajustes necesarios para una conformación anatómica normal, reforzando ulteriormente con tratamiento hormonal correlativo” (Mons.Rodolfo Nolasco)

7. Transexualismo: transexual es la persona que piensa estar en un cuerpo equivocado; tiene cuerpo de hombre, pero piensa y siente como mujer. (El homosexual, en cambio, acepta su cuerpo, pero hace un uso desviado de él.)
Generalmente se da entre varones.
Desde el punto de vista cromosomático no cabe duda acerca de su sexo y ellos lo saben. Los transexuales buscan por lo tanto cambiar su cuerpo a través de operaciones. Blázquez expone el procedimiento con cierto detalle. A nosotros nos interesa por el momento, su valoración moral:
“…En cuanto a las técnicas de cambio de sexo pienso que esas intervenciones quirúrgicas descritas son una farsa de psiquiatras y cirujanos. Ellos mismos reconocen que la transexualidad no se cura con esas extravagantes intervenciones médicas. Ni el conflicto de personalidad ni las tendencias depresivas subyacentes desaparecen después de la cirugía. Realmente lo que se hace es castrar brutalmente a los pacientes y someterlos a un tratamiento hormonal antinatural. Castración que se agrava con un engaño supino. Los nuevos órganos sexuales incorporados son falsos…” (Blázquez, p.486-7)


3.2. Psicológicas

3.2.1. Muchas instituciones ya no consideran la homosexualidad como enfermedad:
a)- En EEUU:
* En el año 1973 la Asociación Americana de Psiquiatría (APA), cediendo a las presiones del lobby gay, retiró la homosexualidad de la sección “Desviaciones sexuales” del “Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-II)
Robert Spitzer, que luego cambió de postura, estimaba en ese momento que debía excluirse la homosexualidad de dicha lista porque para ser considerada un desorden psiquiátrico “debe producir regularmente angustia subjetiva o estar asociada regularmente con algún deterioro en la efectividad o funcionamiento social”. Como en algunos homosexuales no se dan tales características, al menos en apariencia, parecía conveniente excluir el homosexualismo de dicha lista.
* En 1974 se la incluyó bajo el rótulo “Perturbaciones en la orientación sexual”; luego, llamada en el DSM-III: “Homosexualidad egodistónica”; en 1986, en el DSM-III-R fue borrada también dicha categoría. Ahora se habla de “Trastornos sexuales no especificados”
b)- La Organización Mundial de la Salud (OMS), excluyó la homosexualidad de la Clasificación Estadística Internacional de Enfermedades en 1990
c)- Lo mismo hizo Gran Bretaña en 1994; Rusia en 1999 y China en el 2001

3.2.2.. El Dr. Polaino-Lorente nos explica la génesis paulatina de las tendencias homosexuales. A continuación exponemos en resumen su pensamiento:

“Entre las recientes teorías, las hipótesis conductistas son las que, sin duda alguna, han sido mejor acogidas en el ámbito de la psicología. Estas hipótesis postulan que la conducta y la orientación homosexual es algo aprendido, en función de la exposición a ciertos factores que al fin resultan determinantes”

Luego explica que la homosexualidad se arraiga en tres etapas:
a- Etapa de sensibilización
b- Etiquetado
c- Asunción de la homosexualidad

a)- Etapa de sensibilización
En la niñez/adolescencia el niño puede tener gustos, preferencias, que no serían, en principio, propios de su sexo. P.ej: el hecho de que a una niña le gusten los juegos brutos. Ahora bien, no hay que ver en ello un peligro, porque pueden ser cosas pasajeras o que no tienen ninguna relevancia en cuanto a la masculinidad o femeneidad. P.ej: si a un niño mostrara gusto por la cocina, no significaría ello que vaya a ser maricón. De hecho, los más grandes chefs son hombres. La cuestión es que “si se marcan en exceso las diferencias que se dan en su comportamiento, respecto de sus iguales del mismo género, lo que aparecerá en ellos será una cierta conciencia de que son diferentes.”
Otras veces el que se percibe diferente es el joven mismo, aun por cosas que no son importantes. Pero ello “comienza a marcar y teledirigir a ese niño o niña hacia una posición en la que es muy difícil luego la ‘autoconstrucción’ de sus respectivas masculinidad o feminidad”.
“Ante esta situación de pensar y experimentarse como diferente caben al menos en esta etapa, tres posibilidades distintas:
1- Negación: “no soy tan diferente, lo que pasa es que no juego al fútbol. Sin embargo, al día siguiente volverá a hacerse la misma pregunta.
2- Pensar que es algo pasajero
3- Comenzar a dudar y a discutir consigo mismo acerca de si será aceptado o no, tal como es.


La niña marimacho
1- Expresar en más de una ocasión su deseo de ser niño
2- Relacionarse con un grupo de compañeros donde predominan los varones
3- Mostrar preferencia por vestir prendas tradicionalmente consideradas masculinas, a la vez que rechazo por vestir ropa femenina (polleras, medias, etc.)
4- Pérdida de interés por juegos de niñas como las muñecas, y en cambio, sí por los más bruscos (tirarse por el suelo, etc.)

El niño afeminado
1- Preferencia por actividades más bien sedentarias, reposadas
2- Especial sensibilidad ante la percepción de la belleza física por parte de los adultos, que suelen comportarse ante el niño como si se tratara de una niña.
3- Animación y estímulo por parte de la familia, durante la etapa preescolar, hacia la manifestación de conductas específicamente femeninas.
4- En el mismo sentido y en la misma etapa: ser vestidos o tratados como una niña, por parte de los padres o por otras personas que por ser consideradas como modelos, son claves para la propia identidad sexual.
5- Ausencia de un hermano varón mayor (modelo para el niño). A la vez: actitudes de rechazo por parte del padre.


Actitudes de los padres
Madres:
- sobreprotección
- indiferencia
- atención excesiva y alabanza exagerada de determinados rasgos que sirven para la identificación de la belleza física.
Padres:
• indiferencia
- ausencia de interacción (por pasar mucho tiempo fuera de casa o por falta de dedicación)
- rechazo encubierto: el padre ofrece casi toda su atención al hijo mayor;
• manifiesto: el padre desaprueba, fustiga o corrige continuamente el comportamiento del niño.

b)- Etiquetado
En el colegio: un niño ve que su compañero es un tanto diferente, p.ej., porque no le gusta el fútbol, por la manera de sentarse, de hablar, y comienza a llamarlo maricón. Poco a poco se suman los demás compañeros
Los padres: . Y para colmo, al llegar a la casa y comentar algún día lo que está pasando, el padre le dirá: ¿No le rompiste la cara? (Aunque la madre se halla limitado a ir a hablar con la maestra). Y eso será decisivo para el niño.
Él mismo:
- Como no reaccionó como el padre esperaba el sujeto mismo se comenzará a plantear seriamente si no será cierto que es homosexual.
- Para salir de la duda, en la adolescencia, buscará tener relaciones con una mujer. Pero como le falta experiencia y además está bloqueado, probablemente no pasará nada...
- Entonces probará en un medio gay. Si alguien conocido lo ve, no servirá más que para acrecentar y confirmar su fama de marica. Si conoce a un gay “que lo comprende”, que es afectuoso, y se siente bien, pensará que es de su raza.
(Lo mismo si un compañero le enseña a masturbarse: el agrado que experimenta lo relaciona con un varón.)
Le oculta a su familia el que frecuenta antros gay y eso lo lleva a vivir una doble vida, a vivir en la impostura.
El profesional: con su palabra autorizada dará el último golpe de martillo. Si al sujeto le quedaba alguna duda acerca de la “normalidad” de su conducta, será evacuada por el veredicto del psicólogo o psiquiatra.

Dice también algo muy interesante: La homosexualidad podría ser fruto de un espíritu obsesivo: no es que haya está destinado a ser homosexual y su idea se fijó alli hasta que se hizo carne, sino al revés: por ser un obsesivo terminó siendo homosexual. “... esto es muy frecuente, muchos de los supuestos homosexuales que consultan cuando adultos, son personas que han sido diagnosticadas de padecer trastornos obsesivo-compulsivos. Sólo que en ellos, aunque el trastorno obsesivo podía haberse manifestado a través de muy diversos contenidos, no obstante, ha incidido y se ha tematizado casi exclusivamente con estos pensamientos homosexuales.”

c)- Asunción de la homosexualidad
* “Se trata de establecer, de una vez por todas, un fuerte vínculo entre el estilo de vida y el comportamiento homosexual. Esto se manifiesta en centenares de detalles... “(forma de vestir, lenguaje y gestos, lugares que se frecuentan, etc.) “De esta suerte, comienza a descubrir en el nuevo estilo de vida homosexual adoptado, que hay también muchas cosas positivas, que es necesario asumir e identificarse con ellas... En cierto modo, es ésta una exigencia de su mundo interior, que no puede compartirlo del todo con sus amigos no homosexuales, entre otras cosas porque no lo entenderán. Y lo que no se comparte no une...”

* Otro factor importante: es la pertenencia a un grupo gay que le dará la fortaleza que no tendría como individuo (“el orgullo gay”)

3.2.3. Para la Doctora María C. Morales las posibles causas de la homosexualidad son todas de carácter psicológico, unas relacionadas con el ámbito social y otras propias del sujeto. Enuncia las siguientes:
- padre violento, alcohólico, hostil o distante; falta de la figura paterna por muerte o divorcio
- madre sobreprotectora; o al contrario madre que no transmite cariño adecuadamente
- timidez extrema (casi siempre fruto de limitaciones físicas)
- falta de identidad con iguales del mismo sexo
- abuso sexual o violación, etc

Adler la asocia a un cierto complejo de inferioridad
Stekel a miedo al otro sexo.


3.2.4. El doctor Robert Spitzer propugnó en 1973 a que se sacara de la lista de desórdenes mentales del Manual de diagnósticos de la Asociación de Psiquiatría de EEUU, a la homosexualidad como desorden psiquiátrico.
Aunque consideraba que los homosexuales pueden vivir felices y que deben ser respetados.
Pero en el año 2001, cambió su postura, y, en contra de muchos de sus colegas, afirmó:
* Se puede cambiar la orientación homosexual. No solo en cuanto a la conducta externa, sino también en cuanto a las fantasías
* Sin embargo, no todo sujeto cambiará en todo: identidad propia (perfil psicológico); conducta; tendencias; fantasías.
También afirma que gran parte de sus colegas se niegan a ayudar a un casado homosexual a cambiar sus tendencias. Le dirán: “Ud. no puede cambiar y no es ético; lo que yo puedo hacer es ayudarlo a que se sienta bien con su tendencia homosexual”


3.2.5. Dada la importancia de la formación en la niñez y adolescencia no habría que poner la educación de los hijos en manos de homosexuales, ya que, como dice Mons. Rodolfo Nolasco: “Muchos de los iniciados en esta conducta desordenada, han llegado a ella efectivamente conducidos por un docente inmoral e irresponsable, como lo refieren luego cuando quieren liberarse del vicio en que incurrieron por su inexperiencia y curiosidad, hasta entonces quizás sin malicia”.
Al excluir a los homosexuales de cargos en la enseñanza no se les hace ninguna injustita “como tampoco se aceptan como cajeros de banco a los ladrones, ni choferes a los ciegos o daltónicos, ni como policías a los asaltantes”


3.3. Morales
Las prácticas homosexuales son en muchos casos, simplemente, fruto de la corrupción personal. Así lo afirma la Sagrada Escritura.
“En la Sagrada Escritura están condenados como graves depravaciones e incluso presentados como la triste consecuencia de una repulsa de Dios” (“Declaración…”, n.8)

En el A.T.
- Sodoma, Génesis 18, 20: “Dijo pues, Yahvé, el clamor de Sodoma y Gomorra es grande, y sus pecados son extraordinariamente graves”
- Relaciones prohibidas, Levítico 18.22-23: “No te acostarás con varón como con mujer; es abominación” 20, 13: “El que se acueste con varón, como se hace con mujer; ambos dos han cometido abominación; mueran irremisiblemente; su sangre recaiga sobre ellos”
- Jueces 19.22-24.
- Erradicación de sodomitas, 1 Reyes 15.12 (véase 14.24).
- Vida de perdición, Job 36.14.

En el NT
- El homosexualismo consecuencia del ateísmo: “…Por lo cual los entregó Dios a la inmundicia en las conscupiscencias de su corazón, de modo que entre ellos afrentasen sus propios cuerpos. …Por esto los entregó Dios a pasiones vergonzosas, pues hasta sus mujeres cambiaron el uso natural por el que es contra naturaleza. E igualmente los varones, dejando el uso natural de la mujer, se abrazaron en mutua conscupiscencia, cometiendo cosas ignominiosas varones con varones, y recibiendo en sí mismos la paga merecida de sus extravíos…” (Rom.1.24-27. )
- Motivo de condenación eterna: “No sabéis que los inicuos no herederán el Reino de Dios? No os hagáis ilusiones. Ni los afeminados, ni los sodomitas… herederán el Reino de Dios” (1Cor.6.9-10.)
(Cf. 1 Tim. 1,10)

Querer minimizar o relativizar estas afirmaciones contundentes de la Sagrada Escritura va en contra del sentir de la Iglesia (aun cuando venga de parte de teólogos o clérigos…) Así nos advierte el documento eclesial “Atención Pastoral…”:
“Una de las dimensiones esenciales de una auténtica atención pastoral es la identificación de las causas que han creado confusión en la relación con la enseñanza de la Iglesia. Entre ellas se señala una nueva exégesis de la Sagrada Escritura, según la cual la Biblia, o no tendría nada que decir sobre el problema de la homosexualidad, o incluso le daría en algún modo una una tácita aprobación, o en fin ofrecería unas prescripciones morales tan condicionadas cultural e históricamente que ya no podrían ser aplicadas a la vida contemporánea. Tales opiniones, gravemente erróneas y desorientadas, requieren por consiguiente una especial vigilancia.” (n.4)


4)- CLASES

4.1. “No se puede hablar de homosexualidad en general. No se puede hablar de las personas homosexuales como si esa condición …
-…revistiera en ellas el mismo grado de intensidad,
- tuviera las mismas manifestaciones e
- implicara la misma irreversibilidad” (Belén Vendrell)

Se pueden distinguir tres categorías, según la motivación:
1. Homosexualidad “imaginaria” por dependencia afectiva. La atracción que se da es pasajera. Puede tener lugar sin haber sido seguida de ningún tipo de experiencias homosexuales. Afecta sobre todo a los varones adolescentes en períodos de inseguridad o depresión.
2. “Pseudo-homosexualidad” se da en aquellos en los que la tendencia tiene como motivo principal la dependencia afectiva o el dominio. La gratificación sexual es secundaria.
3. H. “manifiesta”. La gratificación sexual en sentido estricto. Esta es la más difícil de desarraigar

4.2. Por otro lado hay que distinguir al homosexual que cumple un papel activo de aquel que es pasivo (rol femenino). Aunque en la mayoría se combinan las dos facetas.



5)- CONSECUENCIAS
“Dios perdona siempre, el hombre a veces, la naturaleza nunca”

5.1. Provoca diversas enfermedades, especialmente el SIDA
La frase que citamos más arriba se cumple claramente en el mal uso de la sexualidad. El homosexualismo acarrea graves enfermedades, sobre todo, el SIDA.
Y aunque los homosexuales quieran negar o diluir esta verdad , el SIDA es provocado por las prácticas homosexuales. Es una epidemia mortal provocada por los homosexuales. Así lo acaba de afirmar Matt Foreman, director ejecutivo de la “Nacional Gay and Lesbian Task Force” (NGLTF), una de las organizaciones más fuertes y combativas de EEUU.
Y lo mismo dijo el año pasado Lorri Jean, Directora Ejecutiva del “Centro Homosexual y Lésbico” de Los Angeles, dirigiéndose a un grupo de militantes: “El VIH es una enfermedad homosexual. Acéptenlo. Póngale punto final”

Expliquemos por qué ocurre ello:

“Durante las relaciones heterosexuales el esperma normalmente no puede penetrar las paredes interiores de la vagina, ya que ésta está protegida por una mucosa especial para que los virus no penetren, además de que tiene múltiples capas. El recto, por el contrario, tiene sólo una célula de espesor y, además, por estar destinado a asimilar los últimos alimentos útiles, contiene vasos linfáticos extremadamente desarrollados, que reabsorben casi todo (incluso los medicamentos y los virus). Esta disposición no es peligrosa porque este conducto normalmente no se abre excepto para descargar su contenido sin dejar entrar nada. Sin embargo, cuando se hace un uso anti natural del mismo se le abre la puerta a muchos virus que normalmente no tendrían casi oportunidad de éxito. Esto se debe a que el esperma penetra fácilmente la pared del recto, rompiéndola o magullándola y produciendo daños inmunológicos. Esta práctica comúnmente produce entre los homosexuales, además de trauma en el recto, un gran intercambio de fluidos del cuerpo con un acceso casi directo de sustancias infecciosas al torrente sanguíneo. Debido a todo esto, las relaciones sexuales anales y otras prácticas (que por pudor no mencionamos aquí), son las formas de contacto sexual más eficientes de contagiar ciertos tipos de hepatitis, SIDA, sífilis y una serie de enfermedades que se trasmiten a través de la sangre. No es extraño que aún antes de la aparición del SIDA ya el 90% de los hombres homosexuales promiscuos estaban infectados de Hepatitis B y de otras enfermedades

Además, muchas de estas prácticas insalubres ocurren en sitios extremadamente anti higiénicos, como baños o espectáculos pornográficos. Y como cada año hasta el 25% de los homosexuales viaja a otro país, este dañino intercambio de gérmenes se produce en muchas partes del mundo

Otro factor que agrava la trasmisión del SIDA y de otras enfermedades por contacto homosexual, es el número elevado de diferentes compañeros (aún anónimos) que tienen los homosexuales. Los estudios al respecto informan que el 43% de los hombres homosexuales admiten haber tenido relaciones sexuales con 500 hombres; el 28% con más de 1000 y los casi "monógamos" con 10 ó menos en toda su vida 16. La anomalía psicológica y la esterilidad de las relaciones homosexuales, caracterizadas por el autocentrismo y la búsqueda del placer sin responsabilidad, hacen que la "monogamia" entre homosexuales o lesbianas sea casi imposible

Si bien es cierto que los casos de SIDA están aumentando con más rapidez últimamente entre los heterosexuales, hay que tomar en cuenta que los factores biológicos y sociales relacionados con el homosexualismo crearon un contexto ideal, en EE.UU. y en otros países del primer mundo, para la trasmisión del SIDA hacia el sector heterosexual de la población. Una vez que el grupo de más riesgo (los homosexuales promiscuos), alcanzó su punto de saturación (un gran número de sus miembros ya están infectados y continúan siendo promiscuos entre ellos), una ola de infección contaminó a otros grupos de menor riesgo a través de hombres bisexuales y del uso intravenoso de drogas. Sin embargo, la población homosexual sigue siendo el grupo con mayor víctimas de SIDA en esos países. En 1992, el 83% de los casos de SIDA en hombres blancos de los EE.UU., tuvieron lugar entre los homosexuales y en Europa los hombres homosexuales constituyen más del 85% de todos los casos de SIDA

Las consecuencias negativas, tanto físicas como mentales, del estilo de vida de los homosexuales y las lesbianas, han dado como resultado un promedio de longevidad bastante más bajo que el resto de la población. Esto se debe no sólo al SIDA, sino a que los ataques al corazón, el cáncer, las fallas hepáticas y otras enfermedades y peligros (como el suicidio y los accidentes), son bastante más frecuentes entre ellos. Comparados con los heterosexuales, los homosexuales tienen 8 veces más propensión a contraer hepatitis; 14 veces más la sífilis y 5,000 veces más el SIDA. En efecto, un estudio reciente ha mostrado que menos del 2% de los homosexuales alcanzan los 65 años de edad. En cambio, en el resto de la población masculina la edad promedio para morir de un hombre casado era de 75 años y el 80% viven más de 65 años. Para los hombres solteros o divorciados la edad promedio era de 57 y el 32% alcanzó una edad mayor. Entre las lesbianas que murieron, la edad promedio era de 45 años y sólo el 26% murió de edad avanzada. En cambio, en el resto de la población femenina la edad promedio de muerte para las mujeres casadas era de 79 y el 85% alcanzó los 65 años. Para las mujeres solteras o divorciadas, la edad promedio de muerte fue 71 y el 60% alcanzó una edad mayor. El examen de la distribución por edades de los homosexuales en las publicaciones científicas, desde 1858 hasta 1992, sugiere un patrón similar de longevidad”

5.2. También acarrea trastornos psicológicos (hasta el suicidio) y adicciones diversas.
Fergusson et al. Encontraron que en una muestra de cohorte de nacimiento, los "gay", lesbianas y bisexuales tienen una tasa significativamente más alta de : Ideas de suicidio (67.9%/29.0%), Intentos de suicidio (32.1%/7.1%) y desórdenes psiquiátricos entre las edades de 14 y 21 - Depresión mayor (71.4%/38.2%), Neurosis de angustia (28.5%/12.5%), desórdenes de conducta (32.1%/11.0%), dependencia nicotínica (64.3%/26.7%), Abuso/dependencia de otras sustancias (60.7%/44.3%), Patologías múltiples (78.6%/38.2%) que la muestra heterosexual (p.876)
“Un número alarmante de hombres y mujeres homosexuales (31.96 %) están atrapados en un estilo de vida centrado en el alcohol” (Fifield)


6)- VALORACIÓN MORAL

Para la Iglesia Católica (y la sana moral):

Los actos homosexuales son intrínsecamente inmorales y la tendencia misma es gravemente desordenada.
(Aunque, evidentemente, quien siente la tendencia, pero no consiente a ella, no peca en modo alguno.)

Así lo explica el P.Fuentes, moralista:

“Están absolutamente desposeídos de la finalidad procreativa que es propia del acto sexual humano (y la cual no puede ser excluida voluntariamente: HV, 14).
Niegan la complementariedad entre el varón y la mujer, la cual está inscrita en la misma naturaleza: no sólo porque el varón y la mujer son complementarios genitalmente sino porque lo son también germinalmente (sus células sexuales son complementarias: óvulo y espermatozoo) y psicológicamente.
Niega la sabiduría creadora de Dios: pues al negar lo único que está explícitamente escrito en la naturaleza del hombre (la complementariedad entre el varón y la mujer), niega el plan de Dios en la creación.
Niegan la autodonación que es la razón última que legitima el uso del sexo. Ya que el acto homosexual es más búsqueda de autocomplacencia que autodonación.
Es un acto antisocial: porque no contribuye con la generación de nuevos hijos a la sociedad. El sexo se ordena a la perpetuación de la especie. Si la práctica homosexual fuera lícita y todos la practicasen equivaldría al suicido social. “

Esto es muy claro
“…Sin embargo, en la discusión que siguió a las publicación de la Declaración, se propusieron unas interpretaciones excesivamente benévolas de la condición homosexual misma, hasta el punto que alguno se atrevió incluso a definirla indiferente o, sin más, buena. Es necesario precisar, por el contrario, que la particular inclinación de la persona homosexual, aunque en si no sea pecado, constituye sin embargo una tendencia, más o menos fuerte, hacia un comportamiento intrínsecamente malo desde el punto de vista moral. Por este motivo la inclinación misma debe ser considerada como objetivamente desordenada.”

“Algunos sostienen que la tendencia homosexual, en ciertos casos, no es el resultado de una elección deliberada y que la persona homosexual no tiene alternativa, sino que está forzada a comportarse de una manera homosexual. Como consecuencia se afirma que ella, no siendo verdaderamente libre, obraría sin culpa en estos casos.” (“Atención pastoral…” n.11)

Algo similar decía ya la “Declaración…”: “ En nuestros días, fundándose en observaciones de orden psicológico, han llegado algunos a juzgar con indulgencia, e incluso a excusar completamente, las relaciones entre ciertas personas del mismo sexo, en contraste con la doctrina constante del Magisterio y con el sentido moral del pueblo cristiano” (n.8)



7)- MEDIOS PARA VENCERLA

7.1. Lo primero que se debe afirmar es que es posible curarse o corregirse de este mal.
Ya que hay algunos que, convencidos de que no hay nada que hacer, porque lo toman como determinación biológica, sostienen que no hay que molestar a los homosexuales. Otros, peor aun, convalidan la homosexualidad como una alternativa de vida.

La homosexualidad se cura (o se abandona) como lo afirman varios especialistas y lo ratifica el testimonio explícito de los involucrados.

Robert Spitzer, famoso investigador psiquiátrico de la Universidad de Columbia: “Estoy convencido de que muchas personas han hecho cambios sustanciales hasta llegar a ser heterosexuales… Creo que eso hace noticia…Empecé este estudio escéptico. Ahora afirmo que tales cambios pueden ser mantenidos” (NARTH 2000)
Bergler: "En poco menos de treinta años he concluído con éxito el psicoanálisis de cien homosexuales... y he visto cerca de quinientos casos en interconsulta. En base a la experiencia adquirida, puedo hacer una declaración firme que la homosexualidad tiene un pronóstico excelente en el tratamiento psiquiátrico-psicoanalítico de uno a dos años de duración, con un mínimo de tres sesiones por semana - siempre que el paciente realmente quiera cambiar. Un número considerable de colegas han obtenido éxito similar".
El profesor Van den Aardweg, licenciado en Psicología en Ámsterdam y conocido especialista en el tema, describe numerosos casos de curación.
“El problema de la homosexualidad es presentado en una injustificada atmósfera de fatalismo”

El Dr. Warren Throckmorton, médico del Grove City College, realizó múltiples estudios de personas que, mediando la correspondiente terapia, dejaron de ser homosexuales. El resultado de sus estudios fue publicado en “Professional Psychology: Research and Practice” y difundido en un artículo aparecido en la publicación oficial “American Pyshcological Association” (APA)

El Dr. Hatterer declara lo siguiente: “Yo he ‘curado’ a muchos homosexuales…Muchos de estos pacientes ‘curados’ (prefiero usar la palabra ‘cambiados’) se han casado, tienen familias y viven una vida feliz. Es un mito destructivo que ‘una vez homosexual, siempre homosexual’. Esto ha hecho, y hará en el futuro, millones de homosexuales convencidos. Y aun más, no solo yo sino muchos otros psiquiatras de prestigio (los doctores Samuel B. Hadden, Lionel Ovesey, Charles Socarides, Harold Lief, Irving Bieber, y otros) han reportado sus éxitos terapéuticos de homosexuales tratables”
Marmor: “Hay pocas dudas de que un cambio auténtico en la elección de objeto sexual puede darse, y de hecho tiene lugar en unos 20 a 50 % de pacientes homosexuales activos que buscan psicoterapia a ese fin”

También lo afirman Bieber, Cappon, Albert Ellis

Jeffrey Satinover, Doctor en Medicina y Filosofía dice estas esperanzadoras palabras:
“He tenido la gran suerte de haber encontrado mucha gente que ha logrado salir del ambiente homosexual de vida. Cuando veo las dificultades que han encontrado, el coraje que han demostrado, no solo al encontrar esas dificultades, sino al confrontar una cultura que usa todos los medios para negarle la validez de sus valores, metas y experiencias, me muevo a admiración… Son estas personas –previamente homosexuales, y todos aquellos que están luchando en este momento en América y en el extranjero- que me parecen un modelo de todo lo que hay de bueno y posible en un mundo que toma el corazón humano, y al Dios de ese corazón, muy en serio. En mis exploraciones en el mundo del psicoanálisis, la psicoterapia y la psiquiatría, nunca antes he visto curaciones tan profundas”.


7.2. Prevenir: es decir, tiene que darse un desarrollo normal del niño/-a en el ámbito familiar, escolar y social
Para la doctora María C. Morales para evitarla hay que remover las causas enunciadas anteriormente. Pero si ya el mal está hecho:
“Se debe buscar orientación profesional adecuada. No se debe aceptar nunca que la inclinación homosexual sea una opción más ni restar importancia a la situación. Por otro lado, no se debe dramatizar el problema, ya que ello puede llevar a situaciones contraproducentes. Tampoco se deben permitir las bromas ni las burlas sobre un tema tan delicado, etiquetar a un niño como homosexual, o permitir que se acepte como tal.”

7.3. Curar o cambiar:
La ayuda de la persona afectada debe venir del psiquiatra, del sacerdote, de la familia y eventualmente de algún grupo especial

Para poder cambiar, deben sentir la ayuda maternal de la Iglesia.
“Esta inclinación, objetivamente desordenada, constituye para la mayoría de ellos una auténtica prueba. Deben ser acogidos con respeto, compasión y delicadeza. Se evitará, respecto a ellos, todo signo de discriminación injusta. Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que puedan encontrar a causa de su condición.
Las personas homosexuales están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismo que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyo de una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana” (Catecismo n.2358-59)

En cuanto desviación moral: la Iglesia invita a los fieles que tienen estas tendencias a recurrir a los medios tradicionales de santificación: sacramentos, oración, meditación, lectura espiritual, mortificación, dirección espiritual, sana amistad.

“Estas personas están llamadas a realizar la voluntad de Dios en su vida, y, si son cristianas, a unir al sacrificio de la cruz del Señor las dificultades que puedan encontrar a causa de su condición. Las personas homosexuales están llamadas a la castidad. Mediante virtudes de dominio de sí mismo que eduquen la libertad interior, y a veces mediante el apoyode una amistad desinteresada, de la oración y la gracia sacramental, pueden y deben acercarse gradual y resueltamente a la perfección cristiana.” (Catecismo n.2359)
(Cf. “Atención pastoral…” n.12)


La Declaración de la Asoc. Méd. Cat. de EEUU da algunas pistas a los sacerdotes para comprender y ayudar a los homosexuales:
a) Las personas que experimentan atracción por el mismo sexo, o se confiesan de pecados en esta área, casi siempre tienen una carga de profundo dolor emocional, pena y resentimiento contra aquellos que los han rechazado, descuidado o herido, incluyendo sus padres, sus iguales y los que los hayan molestado sexualmente. Ayudándolos a perdonar puede ser el primer paso hacia la curación. (Fitzgibbons 1999103)
b) Individuos que experimentan atracción por los del mismo sexo a menudo cuentan una larga historia de experiencias sexuales tempranas, y traumatismos sexuales. (Doll 1992104) Es más probable que personas homosexuales activas se hayan visto envueltas en formas extremas de actividad sexual con otra persona a edad muy temprana. (Stephan 1973105; Bell 1981106) Muchos no le han contado a nadie sobre estas experiencias (Johnson 1985107) y llevan encima tremendo sentimiento de culpa y vergüenza. En algunos casos, aquellos que fueron abusados sexualmente se sienten culpables porque reaccionaron al trauma con comportamiento sexual. El sacerdote puede preguntar delicadamente sobre experiencias tempranas, asegurándoles que sus pecados son perdonados, y ayudándolos a encontrar liberación al perdonar a los otros.
Individuos envueltos en actividad homosexual pueden sufrir también de adicción sexual (Saghir 1973108; Beitchman 1991109; Goode 1977110) Aquellos que se envuelven en actividad homosexual se han envuelto también en formas extremas de conducta sexual o han recibido dinero por sexo. (Saghir 1973111) La adicción no es fácil de superar, recurrir frecuentemente a la confesión puede ser el primer paso hacia la liberación. El sacerdote debiera recordar al penitente que aún los casos más extremos de pecados en esta área pueden ser perdonados, alentándolos a resistir la desesperación y a perseverar, y al mismo tiempo sugerir algún grupo de apoyo que sirva para controlar la adicción.
Personas con atracción por el propio sexo con frecuencia abusan de alcohol, y de drogas legales e ilegales. (Fifield 1977112; Saghir 1973113) Tal abuso puede debilitar la resistencia a las tentaciones sexuales. El sacerdote puede recomendar ingresar a un grupo de apoyo que se preocupe de tales problemas.
Pensamientos de desesperación y de suicidio son también frecuentes en la vida de individuos afectados por atracción por el mismo sexo. (Beitchman 1991114; Herrell 1999; Fergusson 1999) El sacerdote puede asegurar al penitente que hay muchas razones para esperar que la situación va a cambiar y que Dios los ama y quiere que vivan una vida plena y feliz. Nuevamente, perdonar a los demás puede ayudar mucho.
Personas que experimentan atracción por el mismo sexo pueden sufrir de problemas espirituales tales como envidia (Hurst 1980) o autocompasión. (Van den Aardweg 1969) Es importante que el individuo que experimenta atracción por el mismo sexo, no sea tratado como si las tentaciones sexuales fueran su único problema.
La inmensa mayoría de hombres y mujeres que experimentan atracción por el mismo sexo reportan una pobre relación con sus padres (véanse las notas 17 a 23) El sacerdote, como figura paterna que los quiere y los acepta, puede a través de los sacramentos comenzar la labor de reparar el daño y facilitar una relación curativa con Dios Padre. El sacerdote puede también estimular la devoción a San José.
El sacerdote necesita estar al tanto de la profundidad de la curación que necesitan estas personas que tienen un conflicto muy serio. Tiene que ser una fuente de esperanza para los que desesperan, perdón para los que yerran, fortaleza para los débiles, ánimo para los pusilánimes, a veces una figura de padre amante, para los heridos. En suma, debe ser Jesús para estos hijos amados de Dios que se encuentran en una situación muy difícil. Debe ser pastoralmente sensible, pero también pastoralmente firme, imitando como siempre a un Jesús compasivo que curaba y perdonaba setenta veces siete veces, pero que siempre recordaba, "Vete y no vuelvas a cometer este pecado".


8)- LA PROPAGANDA

8.1. El plan siniestro de los gay
Vamos a dejarle la palabra a dos dirigentes del movimiento gay en EEUU, Marshall Kirk y Erastes Pill, que exponen claramente su plan de ataque, en un artículo titulado “Waging Peace: A Gay Battle Plan to persuade straight America” .
Sus objetivos se pueden resumir en tres etapas:
a- Insensibilizar y normalizar
b- Victimizar
c- Demonizar

a)- Insensibilizar y normalizar (lavado de cerebro)

«Creemos que lo primero es insensibilizar al público con respecto a los gays y sus derechos. Insensibilizar al público es ayudarle a ver la homosexualidad con indiferencia, y no ya con apasionamiento. Casi cualquier comportamiento empieza a parecer normal si se satura al público. El modo de entumecer la sensibilidad espontánea hacia la homosexualidad es que haya mucha gente que hable mucho sobre el tema en términos neutrales o favorables. Que se hable del tema continuamente da la impresión de que la opinión pública, al menos, está dividida, y de que un sector considerable admite o aun practica la homosexualidad. Incluso los enconados debates entre detractores y defensores sirven para insensibilizar, siempre que salgan a la palestra gays “respetables” que hablen a favor. Lo principal es hablar de lo gay hasta que el tema llegue a resultar tremendamente aburrido».

Para ello copar los medios de comunicación
«Dónde hablamos tiene su importancia. Los medios audiovisuales, el cine y la televisión, son claramente los más poderosos creadores de imagen en la civilización occidental. El hogar medio norteamericano consume siete horas diarias de televisión. Esto abre un portillo en el mundo privado de los heterosexuales, por el que se puede introducir un caballo de Troya. En lo que toca a quitar sensibilidad, el medio es el mensaje de la normalidad. Hasta ahora, el Hollywood gay ha resultado ser nuestra mejor arma secreta en la batalla por insensibilizar a la mayoría. Poco a poco, en los diez últimos años, se han ido introduciendo personajes y temas gays en los programas de televisión y en las películas. Ha sido, en conjunto, un proceso alentador».


b)- Victimizar: es decir, ponerse ellos en papel de víctimas, de perseguidos
«Hay que presentar a los gays como víctimas y no como revolucionarios agresivos. En toda campaña para ganarse al público, los gays deben aparecer como víctimas necesitadas de amparo, para que los heterosexuales se sientan espontáneamente inclinados a adoptar el papel de protectores. Si, por el contrario, se presenta a los gays como un grupo fuerte y orgulloso que promueve un estilo de vida rígidamente inconformista y desviado, entonces será más fácil que sean vistos como una amenaza pública, a la que estaría justificado resistir y reprimir. Por eso debemos vencer la tentación de hacer alarde público de nuestro “orgullo gay” cuando esto entre en conflicto con la imagen del gay como víctima».

c)- Demonizar y perseguir a todo aquel que se oponga a su causa
«En una fase posterior de la campaña por los derechos de los gays, habrá que arremeter contra los que todavía se opongan. Hablando claro: hay que vilipendiarlos. Aquí nuestro objetivo es doble. Primero, hemos de procurar cambiar su arrogancia en sentimiento de vergüenza y de culpa por ser homófobos. Segundo, hay que mostrar al público imágenes de homófobos acérrimos que tengan otros rasgos y creencias desagradables para el americano medio. Entre tales imágenes podrían estar: el Klu Klux Klan pidiendo que se queme vivos a los gays o se los castre; pastores fanáticos del sur que babean de odio histérico hasta el punto de que parezcan cómicos y trastornados; punkies, matones y criminales que hablen en tono amenazador y descarado de los “maricas” que han matado o les gustaría matar; un recorrido por los campos nazis donde se torturaba y gaseaba a homosexuales».

«Podemos minar la autoridad moral de las Iglesias homófobas presentándolas como retrógadas y anticuadas, desfasadas con los tiempos y los últimos descubrimientos de la psicología. Frente al enorme empuje de la religión institucional, hay que oponer el poder de atracción, aun mayor, de la ciencia y la opinión pública. Semejante no-santa alianza ha demostrado ser una buena arma contra las Iglesias en temas como el divorcio o el aborto. Si se habla abiertamente y en dosis suficientes de la prevalencia y respetabilidad de la homosexualidad, esa alianza puede volver a funcionar».

EN RESUMEN. Este texto nos parece de una claridad meridiana:
- Primero hay que lavarle el cerebro a la masa y hacerle creer que el homosexualismo es algo normal
- Segundo: si yo tengo derecho a ser homosexual (como ud. heterosexual: ¿Por qué me persiguen?)
- Tercero: Hay que levantarse contra esta injusticia; quejarse mucho en los parlamentos y en los medios de comunicación y finalmente, perseguir legalmente a todo aquel que se oponga a sus “derechos”

8.2. El trabajo de manipulación

8.2.1. La manipulación del lenguaje. La primera arma que tienen los activistas homosexuales es la palabra. Queremos decir, el uso mentiroso de los términos. Hablan de “preferencia u orientación sexual” como si la naturaleza humana fuera un tema libre de debate; disfrazan sus discursos con el bonito lema de los “derechos humanos” y tildan de “homofóbico” a aquel que quiere defender los valores morales y la ley natural.
Pero por más que se insista no se puede cambiar la naturaleza de las cosas.
“Un pollo no es un conejo no tradicional que es bípedo y con plumas”, como dice irónicamente Juan Manuel de la Prada.
8.2.2. La manipulación de las cifras. Los activistas homosexuales no sólo trabajan para imponer en la sociedad la idea de que su desviación es normal, sino que también inventan cifras para hacer creer a la gente que son multitud. Emplean, entre otros el famoso “Informe Kinsey”, según el cual el 10 % de la población sería homosexual. Pero el dicho informe ha sido ampliamente refutado.
La mayoría de los investigadores serios hoy en día están de acuerdo en que sólo el 2,5 % de la población podría ser homosexual.

Pero aunque sean pocos en número, son fuertes en recursos. Tienen a los medios de comunicación a su favor; políticos temerosos de echárselos en contra y sobre todo, dinero.

Al respecto dice Mons. Rodolfo Nolasco: “El espacio excesivo que le regalan los medios a las campañas de los grupos militantes del homosexualismo y los temas paralelos sobre transexuales, travestis, etc, con su presencia reiterada en la televisión, diarios y revistas crea en el subconsciente del público la impresión que se trata de un problema que afecta a un número muy grande de la población. Esa creencia más que un error es una mentira sistemática e interesada de quienes no saben o no pueden desprenderse de sus malas inclinaciones y prácticas viciosas y buscan excusas, atribuyéndolas a tendencias genéticas de un ‘tercer sexo’ o ‘género’, según les gusta decir”.

Leamos un elocuente y triste testimonio de lo ocurrido en EEUU, al comenzar a expandirse el SIDA:
David Horowitz, antiguo radical de la década de los sesenta, describe así la influencia de los homosexuales en control de la enfermedad:

"Los métodos agresivos de salud pública hubieran prevenido la expansión de la epidemia a otros grupos. Pero todo esfuerzo que se hacía para tomar las medidas de precaución necesarias era tergiversado por el inexorable poder político que el movimiento de liberación homosexual había logrado crear. Bajo una tremenda presión de los activistas homosexuales, el director de salud pública de la Ciudad de San Francisco rehusó cerrar las "casas de baño", manteniendo que estos eran valiosos centros educacionales sobre el SIDA, aún cuándo el único propósito de estos era facilitar las promiscuas relaciones homosexuales.
Por lo tanto, cuando los funcionarios trataron de instituir procedimientos de screening para los bancos de sangre de la nación, se le pidió a la comunidad homosexual que no hicieran donaciones de sangre mientras continuara la epidemia, pero los líderes políticos homosexuales se opusieron a estos procedimientos porque infringían el "derecho" de los homosexuales a donar sangre. El resultado de estas actitudes revolucionarias fue la difusión del SIDA entre los hemofílicos y algunos heterosexuales. Campañas similares se hicieron contra la realización de pruebas con la finalidad de conocer de dónde procedía el contagio -procedimiento estándar en campañas contra otras enfermedades de transmisión sexual- con lo que se consiguió esparcir el SIDA a las comunidades negras e hispanas, que ahora cuentan con más del 50% de casos conocidos."

8.2.3. La manipulación de la historia. Otro de los argumentos que utilizan es: los pueblos en la antigüedad practicaban la homosexualidad como algo normal. La que habría venido a aguar la fiesta (“gay”) es la Iglesia Católica con su estrechez mental. Pero hay que distinguir épocas y pueblos y no hacer afirmaciones apresuradas.

“…Mucho antes del nacimiento de la Iglesia católica, el ejercicio de la homosexualidad fue condenado por la opinión común y, como los estudios antropológicos demuestran, solamente durante un periodo del Japón antiguo, y en algunos pocos casos de tribus primitivas, la homosexualidad fue aprobada. En la antigua Grecia, durante la Edad de Oro de la Filosofía, la homosexualidad fue declarada contra la ley y se la castigaba severamente. A pesar de que algunos pretendan que en el texto de El banquete Platón defiende la homosexualidad, la verdad es que precisamente en el diálogo de El banquete es donde Platón, con su apasionamiento y su fuerza literaria, despliega, por boca de Sócrates, su discurso sobre lo que es el verdadero amor. Lo que sucede es que, para designar el amor, Platón emplea la palabra eros, que para los freudianos y en nuestro lenguaje coloquial nombra solamente el impulso sexual. No era así en Platón, porque para los filósofos griegos el objeto del erotismo era la posesión constante de lo bello, de lo que perfecciona. Sócrates y Platón no solamente no eran homosexuales, sino que estaban vehementemente opuestos a esta conducta. Hasta tal punto, que Platón, que fue víctima de sodomía por parte de un regente homosexual, condenó esta experiencia como la más degradante y humillante de su vida. Más tarde escribió con respecto a la homosexualidad: "¿Quién en su sano juicio podría promulgar una ley que protegiera tal conducta?". Cuando, en la época del deterioro de la civilización griega, algunos comenzaron a practicar la homosexualidad, el gran legislador persa Hamurabi declaró con desprecio que era "una mancha de la que ningún hombre podía limpiarse". (Rafael Termes, Miembro de la Academia de Ciencias Morales y Políticas)

Citan a grandes “hombres” de la historia, a artistas, etc, que fueron, real o supuestamente, homosexuales, para hacer un planteamiento del tipo “post hoc, propter hoc”. Pero, es evidente que, si fueron grandes pensadores, artistas o gobernantes, no fue a causa de su homosexualidad…
Y el hecho de que haya tenido lugar cierto tipo de comportamiento en un momento de la historia de la humanidad no implica –es obvio- de que haya sido moralmente correcto. La Ley del Talión fue superada por la Ley evangélica; ya no arrojamos desde un barranco a los niños deficientes como hacían los espartanos, etc.

8.2.4. La manipulación de la Iglesia. Queremos decir, hay traidores en el seno mismo de la Iglesia, clérigos o no, de buena o mala fe, ignorantes o nescientes, homosexuales ellos mismos o simplemente “comprensivos”; promotores fervientes y activos, o simplemente tontos útiles.

“Sin embargo, en la actualidad un número cada vez mayor de personas, aun dentro de la Iglesia, ejercen una fortísima presión para llevarla a aceptar la condición homosexual, como si no fuera desordenada, y a legitimar los actos homosexuales. Quienes dentro de la comunidad de fe incitan en esta dirección tienen a menudo estrechos vínculos con los que obran fuera de ella…
…Dentro de la Iglesia se ha formado también una tendencia, constituida por los grupos de presión con diversos nombres y diversa amplitud, que intenta acreditarse como representante de todas las personas homosexuales que son católicas. Pero el hecho es que sus seguidores, generalmente, son personas que, o ignoran la enseñanza de la Iglesia, o buscan subvertirla de alguna manera. Se trata de mantener bajo el amparo del catolicismo a personas homosexuales que no tienen intención alguna de abandonar su comportamiento homosexual. Una de las tácticas utilizadas es la de afirmar, en tono de protesta, que cualquier crítica o reserva en relación con las personas homosexuales, con su actividad y con su estilo de vida, constituye simplemente una forma de injusta discriminación.
En algunas naciones se realiza, por consiguiente, un verdadero y propio tentativo de manipular a la Iglesia conquistando el apoyo de sus Pastores, frecuentemente de buena fe, en el esfuerzo de cambiar las normas de la legislación civil.” (“Atención pastoral…”n.8 y 9)
“…Esta Congregación quiere pedir a los obispos que estén particularmente vigilantes en relación con aquellos programas que de hecho intentan ejercer una presión sobre la Iglesia para que cambie su doctrina, aunque a veces se niegue de palabra que sea así. Un estudio atento de las declaraciones públicas y de las actividades que promueven esos programas revela una calculada ambigüedad, a través de la cual buscan confundir a los Pastores y a los fieles. Presentan a veces, por ejemplo, la enseñanza del magisterio, pero sólo como una fuente facultativa en orden a la formación de la conciencia, sin reconocer su peculiar autoridad. Algunos grupos suelen incluso calificar como "católicas" a sus organizaciones o a las personas a quienes intentan dirigirse, pero en realidad no defienden ni promueven la enseñanza del magisterio, por el contrario, a veces lo atacan abiertamente” (n.14)

“Se deberá retirar todo apoyo a cualquier organización que busque subvertir la enseñanza de la Iglesia, que sea ambigua respecto a ella o que la descuide completamente. Un apoyo en este sentido, o aun su apariencia, puede dar origen a graves malentendidos. Una especial atención se deberá tener en la práctica de la programación de celebraciones religiosas o en el uso de edificios pertenecientes a la Iglesia por parte de estos grupos, incluida la posibilidad de disponer de las escuelas y de los institutos católicos de estudios superiores. El permiso para hacer uso de una propiedad de la Iglesia les puede parecer a algunos solamente un gesto de justicia y caridad, pero en realidad constituye una contradicción con las finalidades mismas para las cuales estas instituciones fueron fundadas y, puede ser fuente de malentendidos y de escándalo”. (n.17)


LOS INTERESES ECONÓMICOS
“Los intereses económicos han movido a los políticos a defender la cultura gay. Unas 500 empresas están dedicadas al colectivo gay, que dispone de sus propias revistas, empresas de servicios, editoriales, librerías o agencias de viajes. Esta irrupción del colectivo gay como fuente de negocio es también una forma de enviar un mensaje: Dinero es poder.” (Belén Vendrell)

Existe un tipo de gays a los que se llama “DINK” (Doble Income, No Kids) = Doble sueldo, sin hijos. Ellos gastan mucho más en ocio y en cuidado personal.



9)- LA LEGISLACIÓN

9.1. Respecto a las parejas
En todos los países donde existen activistas homosexuales se busca y se buscará que las leyes plasmen las siguientes exigencias:
1- Persecución legal a aquella persona o institución que no acepte como normal la tendencia homosexual (al menos quien intente expresar su pensamiento en forma verbal o escrita)
2- Obligación de aceptar en toda institución y ámbito de trabajo a la persona con dichas tendencias
3- Equiparación de las parejas homosexuales con el matrimonio heterosexual.
Ya está aprobado el “matrimonio” homosexual en los Países Bajos (2001), Bélgica (2002), España (2005), Canadá (2005) y Sudáfrica (2006). En EEUU, en el Estado de Massachusetts (2003)

Otros tipos de uniones entre personas del mismo sexo
Aparte del matrimonio, existen otras figuras que contemplan la convivencia de personas del mismo sexo:
Las uniones civiles otorgan a las partes muchos de los derechos y obligaciones que supone el matrimonio entre personas heterosexuales, aunque no las equiparan totalmente. Existen en 13 países europeos: Alemania, Andorra, Dinamarca, Finlandia, Francia, Islandia, Luxemburgo, Noruega, Reino Unido, República Checa, Suecia y Suiza. Las parejas formadas por personas del mismo sexo también tienen acceso a algunos derechos que las legislaciones reconocen al matrimonio en Australia, Austria, Colombia, algunas ciudades y estados de Brasil, Hungría, Israel, Nueva Zelanda, Portugal, así como en varios estados en los Estados Unidos (como Hawaii, New Jersey, Vermont y California) y en Argentina en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, la Provincia de Río Negro y Villa Carlos Paz. El 9 de noviembre de 2006 fue aprobada por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal la Ley de Sociedades de Convivencia, que permite el reconocimiento legal de las uniones civiles entre homosexuales en la Ciudad de México; así como el Congreso del estado de Coahuila, México reconoció la unión de personas del mismo sexo llamandolo Pacto Civil de Solidaridad. El 7 de febrero del 2007 en Colombia, fue aprobada y reconocida los derechos patrimoniales en la decisión del fallo de la Corte Constitucional que equipa algunos derechos a las parejas heterosexuales y a quienes ya se les permite inscribirse en una relación conocida como unión libre para que puedan convivir dos años. En 2007 Uruguay pasó a ser el próximo país latinoamericano, en reconocer las uniones civiles en parejas del mismo sexo en todo el territorio nacional, despúes de Colombia.
En España, además de la legalización de los matrimonios entre personas del mismo sexo, existen leyes de parejas de hecho en Navarra, el País Vasco, Aragón, Cataluña y la Comunidad Valenciana.

4- Posibilidad de adoptar niños o derecho a la paternidad/maternidad mediante la fecundación in vitro ( si se trata de dos varones)
5- Implementación en las escuelas de programas de adoctrinamiento para lograr que los niños y jóvenes abracen las prácticas homosexuales.

En la Marcha del “orgullo gay” realizada en Washington el 25 de abril de 1993 se presentaron 55 “exigencias” para cambiar la legislación norteamericana en diversos ámbitos: familiar, religioso, escolar, militar, etc


El artículo II-8 de la Constitución Europea (16-XII-2004) establece el principio de no discriminación por las tendencias sexuales de una persona.

Un hecho nada desdeñable es la admisión de la “Asociación Internacional de Homosexuales y Lesbianas” en el Consejo Económico y Social de la ONU
EEUU y otras 21 naciones votaron a favor de darle status consultivo.
Entre las naciones hispanoamericanas votaron a favor: Argentina, Brasil, Chile, Cuba, México, Perú y España
La ONU y organismos similares, que trabajan por el control de la natalidad, ven en el homosexualismo un medio adecuado para tal fin.


9.2. Respecto a la adopción
Los homosexuales no se conforman con querer equiparar sus uniones con las normales, sino que quieren tener derecho a arrebatar el fruto de éstas. Por supuesto, una vez más van a utilizar la cantinela de la “no discriminación”. Pero en manera alguna se trata de discriminación. Discriminación sería un trato desigual no justificado. Pero no se discrimina al alcohólico al cual no se le permite ser chofer de un bus o al hombre que no tiene la altura adecuada ser jugador de básquetbol.

Las consecuencias negativas de la adopción por parte de homosexuales son evidentes:
1. ¿Cómo puede crecer sanamente desde el punto de vista psicológico y afectivo un niño que no tiene verdadero padre ni madre? No se puede alterar la naturaleza de un ser.
2. Está demostrado por estudios serios que dichos niños están cuatro veces más propensos a inclinarse por el homosexualismo
3. La falta de estabilidad de las parejas homosexuales, que incidirá inevitablemente en el desarrollo normal del niño.
4. La más alta tasa de suicidios de adolescentes norteamericanos tiene lugar entre los jóvenes con tendencias homosexuales.

“Un núcleo familiar con dos padres o dos madres es, desde el punto de vista pedagógico y pediátrico, claramente perjudicial para el armónico desarrollo de la personalidad y adaptación social del niño” (Asoc.Española de Pediatría)



9.3. La postura de la Iglesia
Está claramente expresada en el Documento de la Congregación para la Doctrina de la Fe del año 2003.

9.3.1. Una ley positiva no puede ir contra la ley natural. Es una ley inválida. Y es preciso “obedecer a Dios, antes que a los hombres”
“No existe ningún fundamento para asimilar o establecer analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales y el designio de Dios sobre el matrimonio y la familia. El matrimonio es santo, mientras que las relaciones homosexuales contrastan con la ley moral natural. Los actos homosexuales, en efecto, "cierran el acto sexual al don de la vida. No proceden de una verdadera complementariedad afectiva y sexual. No pueden recibir aprobación en ningún caso".(n. 4)
El Papa Juan Pablo II decía al respecto: “Lo que no es moralmente admisible es la aprobación jurídica de la práctica homosexual. Ser comprensivos con respecto a quien peca…no equivale a disminuir las exigencias de la norma moral”
9.3.2. Pero la Iglesia no se contenta con condenar una ley explícita que avale las uniones de parejas homosexuales, sino que le recuerda al Estado su obligación de custodiar el bien común y la moralidad de las costumbres. No puede asumir un rol simplemente pasivo.
“Por eso, es útil hacer intervenciones discretas y prudentes, cuyo contenido podría ser, por ejemplo, el siguiente: Desenmascarar el uso instrumental o ideológico que se puede hacer de esa tolerancia; afirmar claramente el carácter inmoral de este tipo de uniones; recordar al Estado la necesidad de contener el fenómeno dentro de límites que no pongan en peligro el tejido de la moralidad pública y, sobre todo, que no expongan a las nuevas generaciones a una concepción errónea de la sexualidad y del matrimonio, que las dejaría indefensas y contribuiría, además, a la difusión del fenómeno mismo. A quienes, a partir de esta tolerancia, quieren proceder a la legitimación de derechos específicos para las personas homosexuales conviventes, es necesario recordar que la tolerancia del mal es muy diferente a su aprobación o legalización.” (n.5)
9.3.3. Un ley inmoral promueve la inmoralidad; provoca la distorsión del sentido moral en el pueblo
“Se podría preguntar cómo puede contrariar al bien común una ley que no impone ningún comportamiento en particular, sino que se limita a hacer legal una realidad de hecho que no implica, aparentemente, una injusticia hacia nadie. En este sentido es necesario reflexionar ante todo sobre la diferencia entre comportamiento homosexual como fenómeno privado y el mismo como comportamiento público, legalmente previsto, aprobado y convertido en una de las instituciones del ordenamiento jurídico. El segundo fenómeno no sólo es más grave sino también de alcance más vasto y profundo, pues podría comportar modificaciones contrarias al bien común de toda la organización social. Las leyes civiles son principios estructurantes de la vida del hombre en sociedad, para bien o para mal. Ellas "desempeñan un papel muy importante y a veces determinante en la promoción de una mentalidad y de unas costumbres".(14) Las formas de vida y los modelos en ellas expresados no solamente configuran externamente la vida social, sino que tienden a modificar en las nuevas generaciones la comprensión y la valoración de los comportamientos. La legalización de las uniones homosexuales estaría destinada por lo tanto a causar el obscurecimiento de la percepción de algunos valores morales fundamentales y la desvalorización de la institución matrimonial.” (n.6)

9.3.4. También va en contra del bien común porque la pareja homosexual (como tal) no aporta nada positivo a la sociedad y, por el contrario, vive de ella.
- No es admisible que tengan los mismos derechos que un matrimonio. La familia es la base de la sociedad. Una pareja homosexual no puede contribuir a la propagación de la especie.
- Claro que puede recurrir a dos medios ilícitos:
- La fecundación artificial
- La adopción. De ello hablamos a continuación

9.3.5. Va en contra de los derechos del niño: derecho a tener un padre y una madre, como lo indica la naturaleza
“Como demuestra la experiencia, la ausencia de la bipolaridad sexual crea obstáculos al desarrollo normal de los niños eventualmente integrados en estas uniones. A éstos les falta la experiencia de la maternidad o de la paternidad. La integración de niños en las uniones homosexuales a través de la adopción significa someterlos de hecho a violencias de distintos órdenes, aprovechándose de la débil condición de los pequeños, para introducirlos en ambientes que no favorecen su pleno desarrollo humano. Ciertamente tal práctica sería gravemente inmoral y se pondría en abierta contradicción con el principio, reconocido también por la Convención Internacional de la ONU sobre los Derechos del Niño, según el cual el interés superior que en todo caso hay que proteger es el del infante, la parte más débil e indefensa.” (n.7)
A esto hay que sumarle el alto riesgo de abuso sexual infantil
Es interesante, al respecto, el testimonio de Dawn Stefanowicz. (Ver su pág. web más abajo)

9.3.6. ¿Qué debe hacer un político o legislador católico?
- Obviamente oponerse a la promulgación de tales leyes
- Si es inevitable su promulgación o ya se promulgó, buscar atenuar la nocividad de dichas leyes por otras menos malas. Claro que siempre debe quedar en claro su oposición, aun a esa ley menos mala. (Cf.n.10)





10)- CONCLUSIÓN

Esperamos que este opúsculo haya servido, aunque sea mínimamente, para llamar a la esperanza a los que padecen este mal; llamar a la conversión a los que se empeñan en abrazar ese género de vida y promoverlo; y llamar a todos a la reflexión acerca de los tiempos que nos toca vivir…





11)-BIBLIOGRAFÍA

MAGISTERIO

- “Declaración sobre algunas cuestiones de ética sexual” – Congregación para la Doctrina de la Fe” – 29-XII-1975
- “Carta sobre la atención pastoral a las personas homosexuales”- 1-X-1986
- “Algunas consideraciones concernientes a la Respuesta a propuestas de ley sobre la no discriminación de las personas homosexuales”- 24-VII-1992
- “Carta a los Presidentes de las Conferencias Episcopales de Europa sobre la resolución del Parlamento europeo en relación a las parejas homosexuales” – Pontificio Consejo para la Familia- 25-III-1994
- “Familia, matrimonio y uniones de hecho” – 26-VII-2000 (n.23)
- “Consideraciones acerca de los proyectos de reconocimiento legal de las uniones entre personas homosexuales”. – Congregación para la Doctrina de la Fe. 3-VI-2003
- Catecismo de la Iglesia Católica – No.2357-59; 2396
- “Instrucción sobre los criterios de discernimiento vocacional en relación con las personas de tendencias homosexuales antes de su admisión al seminario y las órdenes sagradas” – Congregación para la Educación Católica- 4-XI-2005


LIBROS

Blázquez, Niceto. Bioética fundamental. Madrid, BAC, 1996
Mosso, Carlos José. Derecho, Moral y Vida. Bs.As., Cruzamante, 1997
Riechardt, M. Psiquatría General y Especial. Madrid, Gredos, 1958
Segú, Héctor. Conductas sexuales inadecuadas. Bs.As., Lumen, 1996.
Vainer, Oscar Arnoldo. Homosexualidad. Caracterología y tratamiento. Bs.As., López Libreros Edit., 1963
Van der Aardweg, Gerard J.M. Homosexualidad y esperanza. Eunsa, 1977


ARTÍCULOS y CONFERENCIAS
La inmensa mayoría han sido tomados de Internet, de los sitios que enunciamos más abajo.
Algunos de esos artículos y conferencias son los siguientes:

- “Homosexualidad: distorsión publicitaria…”- Mons.Rodolfo Nolasco, - Supl.Boletín AICA No.2116, 9-VII-1997
- “La persona no puede reducirse a sexo”- Entrevista al P. Georges Cottier, teólogo de la Casa Pontificia. 2-VII-2000
- “Homosexualidad y normativa jurídica”- C.Martínez de Aguirre, Catedrático de Derecho civil en la Universidad de Zaragoza
- “Homosexualidad y esperanza. Declaración de la Asociación Médica Católica de EEUU”.
- “Las personas homosexuales”. R.P. Juan de Moya, Doctor en Medicina
- “¿Se puede curar la homosexualidad? – Gerard J.M. Van Den Aardweg
- “Homosexualidad”- En Wikipedia
- “¿Qué enseña la Iglesia sobre la homosexualidad?” – P. Miguel Fuentes, VE-
- “Por qué Hollywood promueve la causa ‘gay’”- Michael Medved. (El art. resume su intervención en el Simposio “Homosexuality and American Public Life, organizado por el American Public Philosophy Institute en 1997)
- “Bioética y etiología de la homosexualidad” – Dr. Aquilino Polaino-Lorente. Catedrático de Psicopatología de la Universidad Complutense
- Comparencia en el Senado sobre la Ley de homosexuales del Dr. Aquilino Polaino
- “La recuperación de una terapia esperanzadora en los conflictos de identidad sexual” – Belén Vendrell Dra. COF Segorbe-Castellón- (Ponencia presentada en al Jornada sobre “La Homosexualidad: un reflexión científica y moral – Pontificio Instituto Juan Pablo II, Valencia – 24-XI-2001)
- “La cultura de la sexualidad invertida” – Patrick Fagan- Rev. “Catholic Workd Report” – Nov.1998, p. 56-63
- “La homosexualidad a la luz de la genética” – Nicolás Jouve de la Barreda (Catedrático de Genética). Ponencia en la Jornada sobre Homosexualidad. Instituto Pontificio Juan Pablo II- 24-XI-2001
- “200 Subjects who claim to have changed their sexual orientation…” – RL Spitzer, MD. – 9-V-2001
- “Adopción por homosexuales: ¿Qué interés prevalece?” – Carlota de Barcino-


INTERNET
Hemos incorporado datos de muchos artículos que no hemos citado para no cansar. Dichos artículos, en su inmensa mayoría fueron tomados de las siguientes páginas web:

www.aciprensa.com
www.arbil.org
www.arvo.net
www.bioeticaweb.com
www.courage-latino.org (Asociación de ayuda a los homosexuales)
www.dawnstefanowicz.com (Pág. de Dawn Stefanowicz para ayudar a la gente que tuvo que crecer en un ambiente gay. Su padre era gay)
www.esposibleelcambio.org (Grupo Juan Pablo II)
http//narth.com (Asoc.Nac. para la Investigación y Terapia de la Homosex)
www.interrogantes.net
www.ive.org (Instituto del Verbo Encarnado)
www.mujernueva.org
www.vidahumana.org


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Me parece un buen tratado, en general sobre la homosexualidad, tiene muchos puntos positivos el documento, pero... se especula mucho sobre aspectos de estudio, ciencia y personajes que nadie puede asegurar si ya estan predispuestos a estar en contra, sobretodo si son heterosexuales,... tambien en este documento, se subestima el dolor, la descriminacion, la persecusion y la condenacion, porque una cosa es lo que se sabe o se ve, y otra muy distinta lo que realmente experimenta la persona en si, sin tener una idea de lo que pasa una persona en esta situacion. Acerca de la Moral, creo que hay una moral universal que nos ayuda a mantener un equilibrio entre los seres vivos, pero tambien hay una moral humana producto de la cultura y lo religioso, que aunque es valida no tiene que ser correcta, ni obligatoria, tomando en cuenta que el ser humano en su afan de imponer lo que cree, es capas de todo, pienso que es relativo. En la historia el ser humano a manipulado muchas cosas, solo porque un grupo con elementos en comun, estan de acuerdo en muchos aspectos, y da como resultado que lo que piensan esta bien. Cuantas cosas han pasado donde la religion ha dicho la ultima palabra, poniendo sus palabras en la boca de Dios, y asi lo convierten casi en ley, como algo verdadero, luego atravez de los anos se descubre que estaban equivocados...pero el dano es inrreversible....

Anónimo dijo...

Siento atracción erotica por personas de mi mismo sexo, no me pongo etiquetas, por que eso me parece aberrante, es solo una parte más de mi personalidad.
Quiero decirte que de niño ni fui afeminado, ni tampoco rechazado por mis compañeros, provengo de una familia de clase media "Normal"
Quiza el provenir de una familia así me planteo uno de los principales problemas, pues al llegar a la adolescencia, o quiza incluso un poco antes, cuando descubrí que me atraian otros chicos, y que por mas que me exforzaba no me llegaban a atraer las niñas. Durante muchos años intente cambiar, pero esto lo único que me ocasiono fue un gran sufrimiento psíquico. ahora soy un hombre adulto, viril. nunca he sido promiscuo. vivi célibe hasta los 27 años y desde hace 8 vivo con mi compañero, y nuestra relación aunque tiene como uno de sus componentes la parte sexual, va mucho más allá de eso.
No es facil. vivir en congruencia con lo que se siente, se sufre el rechazo e inconprensión de los que satanizan sin conocer. pero es peor vivir con una mascara aparentando ser quien no eres. y dañando de paso a una mujer y unos hijos inocentes.