Me causa gracia cómo se rasgan las vestiduras algunos buenos amigos por la publicidad de Benetton.
Obviamente no han entendido que después de tantos años de retroceder frente al enemigo, éste se sentiría tan fuerte e invulnerable como para atacar de esa manera tan infame al Vicario de Cristo.
Por mi parte, prefiero seguir los pasos de mi Maestro y decirles: "Vosotros sois hijos de vuestro padre..."
Los demás sigan los pasos de sus "hermanos mayores"...
Santos Padres de la Iglesia, San Maximiliano Kolbe, orate pro me.
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